Desmaterialización y nanotecnología en el arte actual
Por Fernando López Lage
El arte en el siglo XXI comienza a cuestionar los binarismos, sobre todo los conceptos que son una fórmula que configura los saberes, que le exigen al mundo pensarse desde la medida de lo humano. Este antropocentrismo contiene en su patrón estructural ideas como: la oposición de esencia y contingencia, forma y contenido, cuerpo y mente, entre otros. Los feminismos detectaron la herencia patriarcal de esos dualismos instalados e implantados en los saberes empañando con sus sesgos las distintas formas de habitar el mundo.
La oposición se ve clara en el arte cuando lo binario define el concepto de forma como masculino y el concepto de materia como femenino.
La mitología griega y romana alimentó toda esa episteme fundacional que luego el cristianismo fue adaptando a su favor, hasta que el arte y su empuje reflexivo comenzó a sabotear todas esas premisas.
La filosofía y el arte en Occidente nacen de un enfoque endogámico que ha obstaculizado el pensamiento exterior, alienígena, y de lo otro monstruoso. Muy pocos creadores aluden a lo alienígena en los saberes y esa visibilidad se detecta en los subgéneros del cine: ciencia ficción, body horror, weird, terror, etc.
Existe un espacio interior que corresponde a lo que sabemos y otro en contraposición que es el espacio exterior o lo desconocido. Se promueve una la noción de alien como un enemigo que debe ser aniquilado o domesticado. El desarrollo tecnológico resultado de la explotación de recursos materiales, explota la naturaleza, que ofrece silicio, cobalto, litio, la fuerza de los cuerpos de los trabajadores que articulan esa tecnología y finalmente la fuerza de trabajo de los usuarios.
Entre otros desarrollos que se proveen de esos recursos, la tecnología avanza y la incidencia del extractivismo está generando un alto costo al planeta.
En países de África se extrae el cobalto a pesar de los riesgos de contaminación del agua y de como eso afecta a la población. El 60% del cobalto mundial se extrae de las minas de la República Democrática del Congo. El silicio es utilizado frecuentemente para fabricar los circuitos de los aparatos electrónicos, computadoras, celulares, equipos de música y paneles solares. Argentina y Chile con son grandes proveedores de litio, desde sus salares del Hombre Muerto y Atacama.
En esta formulación sobre la explotación de los actualmente llamados recursos naturales subyace la idea de una materia inagotable. Esa que está contenida en la naturaleza que existe mas allá de lo humano. Frente a estas situaciones donde la materia y su potencialidad hacen un recorrido desde la tierra hasta la nube de internet, la fuente que la provee sigue siendo la misma naturaleza, que se entiende tradicionalmente como un estado natural prístino separado de la especie humana.
La oposición que diferencia lo no humano de lo humano, entendida como naturaleza y cultura, tiene una historia muy larga y difícil de re pensar fuera de los paradigmas modernos.

Timur Si-Qin, A Reflected Landscape, 2016, técnica mixta, dimensiones variables
En Las promesas de los monstruos. Ensayos sobre Ciencia, Naturaleza y Otros inadaptables (1), Donna Haraway plantea: La naturaleza, en definitiva, no es un lugar físico al que una puede acudir, ni un tesoro para confinarlo o acumularlo, ni una esencia para ser salvada o corrompida. La naturaleza no está oculta y, por lo tanto, no necesita ser revelada. No constituye un texto para ser leído según los códigos de la matemática y la biomedicina. Y tampoco es lo "otro" que ofrece origen, reabastecimiento y servicio. Ni madre, ni enfermera, ni esclava; la naturaleza no es una matriz, un recurso o una herramienta para la reproducción del hombre.
También Haraway cuestiona el discurso de la biología, que es un discurso porque "no es el mundo viviente como tal".
La Biología surge para suplantar las Ciencias Naturales e involucra una serie de articulaciones semiótico-materiales que incluyen "escritura, publicación e investigación biológica; medicina y otras prácticas empresariales; [...] metáforas y narrativas disponibles". Argumenta que las teorías son corporales y materiales y una noción como la de naturaleza no es meramente teórica, sino que se trata de una idea materia-discursiva, que surge como consecuencia de prácticas representacionales. En esas practicas el arte tiene un rol fundamental como proveedor de imágenes. En ese imaginario las figuras se construyen como naturales y están constantemente sometidas al dispositivo de los sujetos que las producen, sean artistas, curadores, pensadores, o cualquier otro agente del universo de la cultura.
En la Crítica de la razón pura (1781), Immanuel Kant plantea que la naturaleza es el conjunto de todos los fenómenos que son definidos como objetos de nuestra experiencia. Existe una separación del mundo entre sujetos que conocen y objetos que son conocidos, esa experiencia sensible se define a través de lo sublime con la separación del sujeto trascendental, donde la contemplación del arte tiene mucho que ver.
Esta nueva facultad del espíritu, el sentimiento de placer y dolor, es el lugar donde habita el sujeto y se reconcilia consigo mismo en la contemplación de una naturaleza sublime pero siempre ajena.
La naturaleza es como el arte, parece tener una finalidad apropiada para el conocer.
Las pinturas del alemán Caspar David Friedrich (1774- 1840) presentan a los individuos a merced de las fuerzas de la naturaleza al borde del abismo En las pinturas emergen los elementos de la realidad, árboles retorcidos, colinas rocosas, mar de nubes, elementos que bocetaba previamente en un cuaderno durante sus paseos por la naturaleza. Presentes en las pinturas, adquieren una perspectiva diferente bajo una luz especial y trascendente. Los personajes casi siempre están de espaldas el espectador, generando así un clima misterioso que conduce al concepto de lo sublime. El término alemán Rückenfigur, figura de espaldas, se utiliza para definir ese tipo de composición que fue protagónico en su pintura. Los personajes desde atrás y sin mirada (aunque sabemos que miran) conducen nuestro ojo, en medio de la exuberancia y lo tenebroso del paisaje. Frente a la pintura de Caspar Friedrich somos huéspedes del anfitrión, se produce una simbiogénesis simbólica, los personajes en medio del acto contemplativo nos convocan a ver y a experimentar lo aurático.
La experiencia aurática que define Walter Benjamin se refiere a la cualidad única e irrepetible de una obra de arte, ligada a su aquí y ahora. Esta experiencia implica una conexión profunda y personal con la obra, que produce lo trascendental.

Caspar Friedrich, El caminante sobre un mar de nubes, 1818, óleo sobre tela.
El arte conceptualista de la década del 60 introduce lo inmaterial como objeto y también como medio de estudio. Un cuestionamiento fuerte a lo institucional, la critica del mercado del arte, el proceso de producción que se desvincula del fetichismo del objeto trascendente, del que es un fiel representante Caspar Friedrich.
Los artistas del conceptualismo continúan el esfuerzo por hacer desaparecer las cosas, desmaterializarlas o llevarlas a su estado fantasmático.
El artista Robert Barry (1936)a fines de la década del 60 utilizó ondas electromagnéticas para crear una escultura que era invisible, solo tenía un transmisor electromagnético que desde la galería disparaba las ondas hacia el espacio exterior. También lanzó contenedores de gases nobles a la atmósfera, transmitió una obra de arte a través de la telepatía, hizo cerrar una galería en el período de su propia muestra. Esa estrategia de los artistas conceptuales como Barry donde lo inmaterial es un reflejo procesual, una búsqueda de lo natural y la belleza de sus derivas, concibe el objeto artístico como un epílogo del concepto envolvente total y sublime.
La desmaterialización en el arte es un tópico para la comprensión del arte contemporáneo, pero a lo largo de la historia del arte se podría señalar como cada pasaje de un estilo, manifiesto o lo que sea hacia lo nuevo, implica síntesis y desmaterialización progresiva.
Lucy Lippard (1937) una de las primeras escritoras en reconocer la desmaterialización en el arte conceptual, contempla dos supuestos: la materia es negada al convertir la sensación en concepto y la materia es transformada por el ámbito científico en energía y espacio-tiempo.
En 1973 publica Seis años. La desmaterialización del objeto artístico de 1966 a 1972 (2), que coincidió con el movimiento por los derechos civiles, con la guerra del Vietnam, con el feminismo,y queda mapeado desde allí un álbum de textos de diferentes orígenes. Publica la transcripción de un programa de radio, un listado de films, extractos de declaraciones de artistas, justificaciones de obras, fotografías, comentarios críticos de Lippard señalando a veces lo utópico de la propuesta conceptualista. Los artistas del conceptualismo limitaron su enfoque al museo y al sistema del arte, no para afirmarlos como un límite autoasignado a su práctica ni como fetichización del medio institucional. Más bien como parte de una práctica materialista consciente de su contexto, aunque la actitud transformadora de su propio manifiesto modernista lo superó.

Retrato de Lucy Lippard, Kevin J. Miyazaki, 2024.
Actualmente el arte está sumergido en la ansiedad con la que se busca una solución entre las contradicciones humanistas y los nuevos planteos ontológicos.
Esas formas o prácticas estéticas tomadas como un conjunto de obras de arte y objetos post-digitales materializados, están vinculados a Internet y a una sociedad que pauta un giro en los años 90.
La forma y la materia también se ha extendido al campo de lo científico y es allí donde surgen los avances en la nanotecnología, que muestran que esa materialidad que conocemos e intentamos deconstruir desde lo filosófico o lo artístico, es una materialidad que es mutante. Con el hallazgo de que la materia puede ser deconstruida, la nanotecnología confirma esas hipótesis que provienen de las bases del pensamiento contemporáneo. La nanotecnología es la ciencia que estudia, diseña, crea, sintetiza, manipula materiales, dispositivos y sistemas funcionales a través del control de la materia a escala nanométrica es decir a nivel de átomos y moléculas. Esta disciplina se enfoca en estructuras que tienen dimensiones de entre 1 y 100 nanómetros, donde las propiedades de los materiales pueden cambiar drásticamente debido a efectos cuánticos y superficies ampliadas.
Es una ciencia aplicada al desarrollo, con el potencial de hacer contribuciones significativas en muchos campos, incluyendo la ingeniería, la informática y la medicina. A escala nanométrica, los materiales pueden exhibir propiedades que no se observan en tamaños mayores, como cambios en la conductividad eléctrica, resistencia mecánica o propiedades ópticas.
Nanomedia es un proceso en el que se fabrican láminas delgadas como una oblea de aluminio clonado alterado al nivel de sus partículas sub-visibles, que hacen que la luz se disperse y se esparza. El color no se deriva de pigmentos o productos químicos; es la apariencia en tiempo real de la luz radiante, ya que es dispersada por las estructuras no visibles del material que en este caso es una hoja.

Pakui Hardware, The host, 2021 acero inoxidable, tela, resina, vidrio.
Moldear, esculpir, pintar, es cambiar la materia de su forma, es una intervención en su estructura misma. Con la nanotecnología eso se extiende no solo a la estructura y la forma de la materia, sino también la sustancia, eso que durante muchos siglos para la filosofía era lo que definía lo inalterable de los objetos y su materia.
Con los procesos nanotecnológicos, la materia y su información se comunica consigo misma. La IA y los softwares varios han hecho que la materia se independice de la explicación humana y comience a comprenderse a si misma.
Esto que tiene que ver específicamente con el mundo de la tecnología de alguna manera también se refleja en los humanos, porque su propia naturaleza también está cargada de información, por ejemplo el ADN tiene todos los datos de nuestra potencial existencia biológica. Nuestra naturaleza humana y material está comenzando a ser exclusivamente física. Las premisas humanistas comienzan a disolverse lentamente, la física y la metafísica no son, a partir de ahora, lo mismo que fueron.
Hubo pensadores en la historia que fueron quemados vivos por pensar fuera de la norma o por intentar pensar el origen de la razón más allá de dios, como Giordano Bruno, que propuso que el Sol era simplemente una estrella y que el universo debía contener un infinito número de mundos habitados por animales y seres inteligentes. Fue miembro de la Orden de los Dominicos, propuso en el campo teológico una forma particular de panteísmo, lo cual difería considerablemente de la visión cristiana.
Ed Finn (3) en "La búsqueda del algoritmo: imaginación en la era de la computación": …"El hecho de que los algoritmos deban ser implementados para ser usados es en realidad su característica más destacable. Al ocupar y definir ese incómodo término medio, los algoritmos y sus colaboradores humanos desempeñan nuevos roles como máquinas culturales que unifican ideología y uso, matemática puras y humanidad impura, lógica y deseo."
Muchas veces las plataformas físicas o materiales están ocultas, como si existiera un software sin el hardware. Como si la nube no tuviera cables, como si Internet y las plataformas estuvieran ajenas a la emisión de dióxido de carbono al medio ambiente. Esto trae como consecuencia la continuidad de los supuestos binarios que señalaba al principio del texto.
La tecnología supuestamente se desarrolla sin entrenamiento filosófico y por lo tanto desconocemos donde está lo que conocemos como trabajo inmaterial.

Scott Lyall, Nanofoil (SLStudio.clone_1 / 16/2), 2018, estructuras fotónicas grabadas con UV en papel de aluminio, revestimiento de polímero, marco pintado con caseína, 9 x 7 cm.
Los escáneres, la fotografía e impresión digital, los gráficos por computadora, tintas curadas con UV, la silicona, aleaciones de aluminio, nuevos plásticos, resinas y cauchos, el software de optimización, la robótica, impresión 3D, tecnología láser, materiales de construcción avanzados, la IA, junto con medios que ya estaban como el dibujo, la pintura, el tejido, el tallado en madera y piedra, el soplado de vidrio, la fundición de bronce, etc., todo está, actualmente, al alcance de cualquier artista.
El desapego de la idea del sujeto humano intérprete de los objetos propicia que las cosas y sus material es puedan generar sus propias relaciones, sus propios ensamblajes, asibles, inasibles, bióticos, abióticos. Sería una forma de desarticular la supremacía de lo humano sobre las materialidades.
El sujeto del humanismo cree mirar como un juez imparcial y omnisciente y cree que está a salvo de las corrupciones de la materia. Habita de forma segura en un diorama del mundo/ constructo, que podrá ser sostenido si no se cruzan las fronteras que separan lo ilusorio de lo real.

